El viernes pasado, Bethesda liberó el Early Access de uno de los juegos de móviles más esperados desde su anuncio. Pero, ¿Blades se siente como el Skyrim de Celular? Descúbrelo aquí.
El año pasado, durante la conferencia de Bethesda en E3, en la que anunciaron su fallido Fallout 76, también nos llevamos una sorpresa con el anuncio de The Elder Scrolls: Blades. Una propuesta que en su momento nos prometió “ser una experiencia masiva y con gráficas de consola en tu celular” y que por fin podemos meterle mano y ver si se han cumplido las promesas. Esto claro, sin olvidar que seguimos en Early Access y que todo puede cambiar.
¿Gráficos de consola?
No voy a mentir, el juego se ve impresionante en la pantalla del celular y definitivamente si consigue transmitir esa sensación de “juego de consola”. ¿Cuál consola?, probablemente un Xbox360 o un PS3, pero eso no le quita que es uno de los juegos más bonitos que hemos visto últimamente. Además, no olvidemos que saldrá para PC, donde seguramente nos darán un paquete con mejores texturas.
¿Experiencia masiva?
Pues… En el Early Access parece que todo el juego está liberado para que lo explores. El detalle es que no hay mucha exploración que hacer. Si estabas pensando que tendrías un mundo abierto como en Skyrim en tu celular, lamento decirte que el juego no funciona así.
Una vez que tengas acceso a tu destruido pueblo, deberás dedicar tus primeras horas a juntar suficientes recursos para irlo reconstruyendo, paso a pasito. Tu pueblo será como un punto de reunión, en donde tendrás acceso al herrero, las pociones y demás servicios que te ayudarán en tu camino, pero no podrás salir de él. En vez, hay un tablero de “Anuncios” en el que puedes ver tus misiones actuales, los “empleos” de mercenario que te dan dinero y recursos (pero no avanzan la historia) y algunos Retos que dan un dinerito extra.
Una vez que escojas tu misión o trabajito, serás teletransportado mágicamente al principio del calabozo, el cual deberás explorar para cubrir determinados objetivos: Recoletar X número de X cosa, eliminar X número de X enemigo, o simplemente explorar todo el espacio. Estos calabozos están generados proceduralmente, usando cuartos prediseñados y uniéndolos aleatoriamente para entregar espacios que no siempre son iguales, pero después de un rato se vuelven familiares.
La variedad de cuartos da para que tengamos muchas opciones y variedad al momento de explorar y hacer misiones, pero lo cierto es que después de unas horas, todos los calabozos se sienten iguales y ese ímpetu por explorar los rincones se pierde en la repetición.
Controles
Blades está diseñado para que lo puedas jugar en modo retrato o en modo horizontal y la experiencia es prácticamente la misma. Pero luego de experimentar con ambos modos, debo recomendar el modo horizontal, simplemente porque puedes usar los sticks virtuales y eso hace que de verdad se sienta como un Elder Scrolls.
Cuándo juegas en modo retrato, tienes la ventaja de poder jugar con una mano, coshino, pero tu movimiento está limitado a que tu personaje vaya al punto de la pantalla donde le digas y al movimiento de cámara arrastrando el dedo por la pantalla. Esto no sólo estorba muchísimo y se siente torpe, el combate se vuelve solo ver tus pulgares y esperar a atinarle al botón de escudo.
En modo horizontal, los extremos izquierdo y derecho de la pantalla te dejan utilizar unos sticks virtuales que hacen que puedas moverte por los calabozos como si trajeras un control en la mano, el izquierdo controla el movimiento y el derecho controla tu vista. Esto hace que explorar se sienta mucho más cómodo y distribuye mucho mejor los botones para magias y habilidades al momento de estar en combate.
Gameplay
Pero entonces, ¿Se juega como los Elder Scrolls que conocemos? Yo diría que casi. Los elementos clave de los TES anteriores están presentes en Blades, aunque hay varias mecánicas que, hasta la fecha, brillan por su ausencia.
Empecemos por el combate. Para iniciar el combate deberás acercarte a un enemigo, hacer que voltee hacia ti y de este modo activar el “modo de combate” del juego, en el que (si estás jugando en horizontal) de un lado de la pantalla tienes un botón para activar tu escudo y el resto de la pantalla para activar tu arma, la cual irá llenando un círculo entre más tiempo dejes el dedo en el mismo sitio y lanzará el ataque cuando lo sueltes. Hay un sweet spot en el que si sueltas el dedo en el momento en que el círculo se llena por completo, harás un golpe crítico y si levantas el escudo en el momento exacto en que te va a golpear, apendejas al enemigo unos valiosos segundos.
La dinámica del combate es entonces, un juego de observar a tu oponente para activar el escudo, causar daño con tu arma o con magia y cubrirse de nuevo, repitiendo hasta la victoria. Afortunadamente el juego ofrece algunas opciones adicionales para meterle más sazón a las peleas.
Ya no hay flechas en la rodilla.
Sin duda por culpa del sistema de pelea del juego, no hay arcos ni flechas en este momento, ojalá en el futuro lo implementen, ya que sin arcos ni flechas… Tampoco hay Stealth.
Si tu manera favorita de jugar era ocultándote y aprovechando esos dulces multiplicadores de sigilo, te tengo malas noticias: Todo el combate es cara a cara, con este baile de «me cubro, te pego, me cubro»
Magia, Habilidades y Resistencia
Cada que subes de nivel, podrás elegir en qué gastar tu punto de experiencia. Primero deberás asignar algunos puntos a Magia o a Resistencia, aumentando el total de acciones que puedes hacer. También hay 3 árboles de habilidad en los cuales gastar tus puntos y se dividen en Magia, Habilidades y Resistencia.
El árbol de Magia te permite aprender nuevos hechizos y mejorar los que ya tienes. El árbol de Resistencia te permite desbloquear algunas habilidades físicas, como esquivar ataques, hacer un ataque fuerte o usar tu escudo para empujar al oponente y hacerle daño; y el árbol de Habilidades te permitirá mejorar el daño que hagas con ciertas armas y tu resistencia a algunos elementos como fuego o veneno.
Ya en los calabozos, tanto la magia como la resistencia se recargan automáticamente, para la salud deberás consumir algunos ingredientes que encuentres en la cueva (desafortunadamente no puedes cargar con tu despensa de hongos y carne de rata de reserva) o usar las muy escazas pociones de salud que te salgan en los cofres (al menos hasta que tengas suficientes recursos para construir la pocionería).
Los Cofres
Cada misión te recompensa con dinero, gemas verdes (que son la moneda que puedes comprar con dinero real) y al menos un cofre (además de los que encuentres explorando). Cada cofre podrá ser de Madera, Plata, Oro o Legendario y entre más exótico sea, más tiempo deberás esperar para que se abra (o gastar gemas verdes para abrirlo cuando tu quieras) y mejores recompensas habrá en su interior.
Recuerda que, como buen juego de TES, hay un límite en la cantidad de items que puedes cargar y en la cantidad de cofres sin abrir que puedes tener. Estos límites los puedes expandir usando, adivinaste, gemas verdes.
Materiales
Si no eres nuevo en esto de los Elder Scrolls, los materiales van a ser algo normal para ti. Todo el tiempo que explores y como recompensa en los cofres, podrás encontrar diferentes materiales como piedra, madera o hierbas, que puedes usar para forjar armas y armadura nuevas, crear pociones y venenos, así como construir diferentes estructuras en tu pueblo.
El Abismo
El Abismo es un espacio en el que estarás explorando una serie infinita de pasillos y pisos, más difícil con
Conclusión
Este intento por llevarnos una experiencia completa de Elder Scrolls a los móviles se agradece y todavía más cuando vemos que en una semana ya han metido 2 actualizaciones que arreglaban algunas cosas muy molestas (los cofres plateados tardaban 3 horas en abrirse, ahora solo es 1 hora). Definitivamente tiene algunos problemas de ritmo y la misma dinámica del juego te obliga a estar grindeando constantemente para subir de nivel, obtener materiales y volverte suficientemente fuerte para seguir adelante en la historia.
Se extrañan elementos clásicos de juegos anteriores, como poder cargar una rueda de queso completa para curarte a media batalla y el poder sorprender a tus oponentes con flechas mientras estás oculto en la oscuridad, pero apenas estamos en abril y el juego promete salir hasta otoño, así que hay muy buen tiempo para que los desarrolladores arreglen los detalles y tengamos una mejor experiencia con Blades.
También es importante recordar que el juego no está disponible más que para algunos dispositivos más o menos modernos (esta reseña se hizo con un Pixel 2), aunque Bethesda promete incluir todos los dispositivos posibles para el lanzamiento. En mi opinión el juego está hecho para ser un éxito en Switch y estoy seguro que Bethesda lo sabe también.
Así como está el día de hoy, Blades se lleva:
FLOOX 